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justicia¿Por qué no crees en Dios? «Porque el mundo esta lleno de dolor y sufrimiento» ¿Y por qué Dios no pudiera querer eso? «Porque dices que Dios es bueno»¿Y tú por qué dices que la falta de sufrimiento es un bien, tú como sabes que sufrir y dolerse no es bueno?… podrá no ser agradable o conveniente ¿pero por qué un ser inteligente como tú que observa la naturaleza puede quejarse de cómo es? Lo natural es sufrir y morir…

¿Cómo puedes decir que hay algo justo y algo injusto? Cuando ves muriendo a un niño de cáncer en la cama ¿cómo puedes tú como ateo decir que eso es injusto…? ¿Cómo saber lo que es injusto si no sabes o intuyes lo que es justo? ¿Y cómo puedes intuir lo que es justo si solo eres un cumulo de gases evolucionados en un hombre? —y no niego la evolución— Y no me hables de la empatía animal, un antropomorfismo que proyecta en instintos y reacciones animales la capacidad única del hombre de saber lo que está bien y lo que está mal, de decidir, de conocernos a nosotros mismos, de conocer a quién hacemos bien o mal, y las consecuencias de todo ello.

¿La justicia es un instinto? ¿un deseo? … Si es un instinto ¿Por qué estaría sobre otros instintos?, por ejemplo el instinto sexual y de supervivencia por sobre el instinto de justicia de una víctima de violación… ¿Si es solo un deseo que ese niño no muera, por qué considerarlo injusto? Tus deseos quizá no son los míos… pero sin embargo parece haber entre los hombres un consenso profundo de lo que significa la justicia.

Decir que no crees en Dios por el mal en el mundo es ridículo, ¿Qué es el mal? ¿Cómo puede haber mal sino tienes conciencia del bien? … ¿Por qué duele? Pero ir a la guerra también duele y mucho, y más aún cuando sabes que vas a morir… y sin embargo lo justo era ir a detener a los Nazis…, donde todo el mundo sabia que un gran mal se estaba manifestando ahí, ahí donde se clamaba justicia, donde se clamaba por acciones que ponían en peligro la propia vida.

A un traidor del ejército enemigo lo usamos, le pagamos y aunque nos es muy ventajoso y conveniente tenerlo, lo despreciamos, lo consideramos un vil gusano porque no tiene honor… debería ser un héroe para nosotros y sin embargo a pesar de su valor para nuestros planes si pudiéramos lo ejecutaríamos… Este comportamiento nuestro es bastante sospechoso y sin sentido a menos de que hubiera un “código” por encima de lo que nos es conveniente o placentero.

Si alguien me rompe el brazo jugando fútbol americano me dolerá, pero será parte del juego y no diré que fue injusto… pero si me entero que alguien tiene planes de romperme el brazo, aunque no lo haga ni lo logre, me molestaré, me parecerá absurdo e injusto que esa persona lo piense o intente… ni siquiera si esa persona fuera completamente incapaz de ser una amenaza para mí podría dejar de considerar malvada su intención… ya no son los actos convenientes e inconvenientes, ni siquiera sus consecuencias, ahora son las “intenciones” de las personas las que son juzgadas… ¿Pero qué locura es esta? ¿Por qué la humanidad espera de sí misma no solo actuar bajo un código, sino pensar acorde a él, tener intenciones acorde a él…? ¿Y como podemos exigirlo a los hombres si a veces no nos conviene ni a nosotros ni a ellos, si no es algo placentero, algo que nos garantice una ganancia, ni personal, social o biológica?… Lo más sencillo es exterminar a todos los enfermos contagiosos del mundo, es lo mejor para ellos y para nosotros… pero si digo esto me convierto en un abominable… ¿pero por qué maldito código me estás juzgando tú y la humanidad? ¿Acaso existe realmente un bien y un mal? ¿Acaso existe en la naturaleza y en nosotros mismos —en un nivel superior— algo que me viene fuera del instinto, lo placentero, lo conveniente, algo que me presiona?

Si Dios existe y creó este mundo, no puede ser parte de este mundo ni puede observarse en el mundo… a un pintor no puedo verlo en su pintura, ni puede ser parte de su pintura, y a lo más que puedo aspirar es a ver algo de los pensamientos del pintor en su obra… reflejos, tendencias, gustos… una voz en ella que me susurra algo ínfimo del autor. Si Dios existe no puedo encontrarlo en el mundo, pero si quiere comunicarse o decirnos algo, debe haber algo en el mundo y en nosotros que nos hable de Él y sus intenciones. Quizá el dolor que sentimos al ver a un niño morir de cáncer o al ver la injusticia de los campos de concentración Nazi nos quieren decir algo.

—CJBS